Al final encontramos una nueva utilidad
para la parte trasera de un armario
y también para todas las arandelas
que quitamos a los tapones de rosca
( a parte del resto de las cosas: botellas, tubos, tapas...)
Me gusta especialmente porque pueden jugar todos y todas,
cada uno a su altura,
(aunque los pequeños no se resignan y se suben a una silla)
Y también porque aunque tires la bola por el mismo sitio, y la misma bola,
no siempre sigue el mismo recorrido.
Tiramos varias a la vez desde distintos lugares...
Por la red he visto algunos muy bonitos y también para agua.
Intentaré poner un vídeo.